Una vez que pruebes este método, nunca lo abandonarás y te atraerá por su practicidad, bajo costo y beneficios al mismo tiempo.
Usar una lavadora para lavar la ropa se ha convertido en algo común y muchas amas de casa han aprendido a utilizar trucos sencillos para perfeccionar este proceso y deshacerse de las manchas más rápido.
Las manchas rebeldes son uno de los problemas al que se enfrentan casi todas las amas de casa.
Para mantener la ropa limpia y fresca después del lavado, las mujeres inteligentes utilizan un producto farmacéutico barato: la aspirina.
A pesar de la aparente impracticabilidad de su uso, la aspirina puede hacer frente a diversas manchas en la tela.
La aspirina contiene ácido salicílico que, cuando se lava, solucionará tres problemas a la vez:
La cantidad óptima sería de aproximadamente 5 comprimidos de 500 mg, si contamos con una carga completa del tambor de la máquina automática.
Puede mejorar el efecto de la aspirina si primero la tritura hasta convertirla en polvo, la vierte en un recipiente con agua y deja la ropa en remojo durante varias horas.
Después de este procedimiento, puedes lavar las cosas de la forma habitual.
Como resultado de este truco, después del lavado no encontrarás ni una sola mancha en tus cosas y en tu ropa de cama, no quedará ni rastro de ellas.