Este es un viejo truco que ayudó a nuestros antepasados a almacenar cereales durante mucho tiempo.
Para hacer esto, coloque las uñas limpias en un recipiente con cereal. Le salvarán de varios problemas a la vez y no solo prolongarán su vida útil.
Se cree que en este caso definitivamente no aparecerán errores.
Aún así, es difícil deshacerse de los parásitos y la papilla en la que se encontraban ya no es apta para cocinar.
En este caso, los insectos pueden propagarse rápidamente y penetrar en otras bolsas de productos a granel.
Si no quieres poner clavos, puedes llevar cualquier otro objeto metálico, pero es importante que no caiga accidentalmente en la sartén durante la cocción.
Puedes, por ejemplo, poner una cucharada en un frasco o bolsa.
Como último recurso, como señalan las amas de casa experimentadas, puedes poner varias bolas de papel de aluminio en el cereal.
Vale la pena señalar que este consejo funciona no solo con sémola, sino también con harina, así como con cualquier otro cereal.