La cocina siempre ha sido considerada un lugar especial de la casa. Aún así, es necesario cuidar la habitación en la que se prepara la comida. Es importante eliminar oportunamente todo lo innecesario y mantener el orden.
Pero si no es un miembro de la familia quien se ofrece a ayudar con las tareas del hogar, sino un invitado, entonces es mejor negarse.
Si un extraño lava los platos, puede quitarle la felicidad y la riqueza a la familia.
Además, este procedimiento es perjudicial incluso para un extraño. Existe el riesgo de contraer problemas de salud.
Si un familiar o un extraño decide ayudar a limpiar, es recomendable negarse. De lo contrario la casa se llenará de conflictos.
La basura traída por un extraño amenaza con una serie de problemas y problemas financieros. La situación se complica si se hace por la noche.
El augurio es malo. La negativa se duplica si el acto fue cometido por un invitado.
Se cree que las dificultades económicas comenzarán en la familia y es posible que aguarde una enfermedad.