A los principiantes en economía doméstica les puede parecer que no hay nada complicado en limpiar las tapas de cristal de sartenes y ollas hasta que brillen.
A primera vista, esto es así, pero hay una cosa: a menudo estos productos tienen inserciones de metal alrededor de las cuales se acumula la suciedad.
Es poco probable que puedas eliminar la grasa congelada y los trozos de comida secos con solo una esponja y detergente.
Estas manchas primero deben remojarse y luego eliminarse con un cepillo de dientes viejo, la punta de un cuchillo o un pincho de madera.
¿Qué puedes utilizar en la primera etapa?
El peróxido de hidrógeno al 3%, que se debe verter debajo del borde de la tapa, suaviza perfectamente incluso las manchas viejas. Después de 10 minutos puedes empezar a limpiar.
Como opción, utilice una mezcla de jabón para lavar y refresco.
Coloque las tapas en un recipiente grande, agregue 5 litros de agua, 5 cucharadas de refresco y 1 cucharada de virutas de jabón para lavar.
Hervir las tapas a fuego lento durante 15 minutos y luego seguir el esquema anterior.