Los recuerdos negativos de tu camerino, lleno de cosas peores que un almacén de ropa, siempre te perseguirán si no sabes cómo solucionar el problema rápidamente.
Un armario desbordado contiene cosas de tu pasado que viajan contigo durante décadas en caso de que pierdas o engordes.
En un armario abarrotado de cosas, puedes encontrar cinturones, blusas y pantalones viejos que han pasado de moda, pero que esperan su mejor momento.
Si tu armario está lleno de cosas, es hora de hacer una auditoría y dejar en él sólo lo imprescindible.
La primera e importante regla es limpiar radicalmente para deshacernos de todo lo innecesario de una vez por todas.
No dejes nada a un lado para “pensarlo más tarde”, de lo contrario las cosas viejas terminarán nuevamente en los estantes del armario.
Reduce tu guardarropa al mínimo para que solo queden las cosas que necesitas y que te resulten cómodas de llevar.
Siga una regla simple: un guardarropa para la temporada no tiene más de 10 piezas. Deseche el resto sin arrepentirse o envíelo a un almacenamiento profundo.
Los artículos básicos pueden incluir: jeans y pantalones de diferentes colores, un vestido de punto, una falda lápiz, varias camisas, camisetas, una chaqueta, un cárdigan.
Sepa cómo combinar prendas para crear nuevos looks y más conjuntos.