Las amas de casa usan glicerina no solo en procedimientos cosméticos, sino también para resolver problemas cotidianos.
Hay dos tipos de glicerina: natural (a base de aceite) y sintética. Las amas de casa utilizan principalmente el primero.
Ventanas, espejos, mesas o elementos decorativos de vidrio: todo esto se puede lavar hasta obtener brillo con glicerina.
Solución de lavado: 100 ml de agua, 60 ml de glicerina y 6-8 gotas de amoniaco. Las superficies de vidrio no sólo brillan, sino que también están protegidas del polvo.
Para evitar que los espejos se empañen, límpielos con una solución: 1 cucharada. l. glicerina y 10 cucharadas. l. alcohol etílico o vodka.
La glicerina se utiliza para eliminar casi cualquier tipo de mancha. Por ejemplo, los restos de bayas se eliminarán con una mezcla: yema de huevo y 40 g de glicerina.
El producto se aplica sobre la superficie contaminada y se deja durante 3 horas y luego se limpia con un paño húmedo.
La glicerina suaviza el tejido con el que se confeccionan la ropa de cama y las toallas de felpa.
Después del lavado, las prendas se remojan en una solución: 1 cucharadita. glicerina por 3 litros de agua. Luego enjuague con el siguiente líquido: 1 cucharadita. amoniaco por 1 litro de agua.