No todo el mundo piensa en lo sucias que se vuelven las botas de invierno si no se cuidan adecuadamente.
Mientras pulen el exterior, ignoran limpiar el interior. En este caso, se garantiza un olor desagradable y, en ocasiones, hongos.
En el interior de los zapatos y las botas se acumulan no menos gérmenes que en la superficie exterior. Incluso los zapatos caros empiezan a emitir un olor desagradable con el tiempo.
El problema se puede solucionar con sprays y desodorantes especiales con efecto antifúngico. Sin embargo, existe una forma más eficaz.
1. Lavar las plantillas periódicamente. Primero puedes remojarlos en una solución de gel de lavado con acondicionador.
2. Cuanto más tiempo estén mojados los zapatos, más rápido aparecerán olores desagradables y hongos. Por lo tanto, es necesario secar las botas con regularidad. Pero es mejor no poner los zapatos directamente sobre la batería, porque... los microbios se multiplicarán más activamente.
3. Es mejor colocar los zapatos no lejos del radiador y colocar sal de mesa en su interior, que absorberá perfectamente la humedad.
Puedes tomar calcetines viejos y agregar 3-4 cucharadas. l. salar, atar y colocar dentro del zapato. Para aromatizar, puedes dejar caer un poco de aceite esencial en tu calcetín.