Muchas amas de casa todavía gastan enormes cantidades de dinero en diversos productos químicos domésticos para limpiar suelos laminados.
Sin embargo, no hay que culparlos: lo más probable es que simplemente no estén familiarizados con un producto asequible que no es peor que sus homólogos más caros.
El "ingrediente secreto" se refiere nada más que a la glicerina líquida.
Puede comprar una botella en cualquier farmacia, después de lo cual puede correr a casa y comenzar a limpiar.
Para hacer esto, necesitarás llenar un balde con agua tibia y agregar una pequeña cantidad de champú o jabón para platos.
Vierta aproximadamente entre 1 y 1,5 cucharaditas (dependiendo del volumen de agua) de glicerina y luego proceda como de costumbre.
Después de esta limpieza, el suelo se vuelve brillante y no se encontrarán rayas ni siquiera durante el día con fuego.
No tenga miedo de que después de usar glicerina se resbale en el laminado o sus calcetines se peguen al suelo; las amas de casa que han probado este método aseguran que nunca antes había sucedido algo así.