Toda la población se divide en dos tipos: personas que limpian una vez a la semana, normalmente los fines de semana, y personas que limpian el apartamento todos los días por partes.
Cualquiera que sea el hábito establecido, muchas personas se olvidan de los mismos elementos. El principal problema es que estos artículos acumulan muchas bacterias peligrosas con el tiempo.
A la hora de limpiar no debes olvidarte de las siguientes superficies y artículos del hogar: es importante limpiarlos con detergente o desinfectante.
El frigorífico se abre muchas veces al día y cada vez se toca la manija de la puerta. En ocasiones esto se hace con las manos contaminadas con alimentos, lo que aumenta aún más la acumulación de suciedad y es un caldo de cultivo para patógenos.
No basta con limpiar el estante del baño, también hay que mirar las cosas que hay sobre él. El portacepillos de dientes es una de las cosas más sucias de la casa. Puede estar lleno de bacterias e incluso moho.
El tirador de la puerta de entrada es lo primero que toca una persona al llegar a casa, por lo que se acumula mucha suciedad en él. Los residentes de los apartamentos también suelen tocar las manijas de las puertas dentro de la casa, por lo que también contienen muchos patógenos. Es importante desinfectar puertas y tiradores de vez en cuando.
Se ensucia con aceite, suciedad y células de la piel debido al uso diario, pero la mayoría de las personas no limpian su cepillo con mucha frecuencia. Sin embargo, si nunca haces esto, el peine manchará incluso el cabello limpio.
La ropa sale limpia de la lavadora. Sin embargo, toda la suciedad de la ropa entra en la máquina y puede adherirse a sus partes internas. Es importante mantener el interior del aparato limpio y seco después de cada lavado. Antes de que aparezca el olor de advertencia, conviene lavar la máquina de vez en cuando con un limpiador para lavadoras.