Incluso la ropa de mejor calidad pierde color con el tiempo debido al lavado y al desgaste.
Pero esto se puede arreglar. Una hoja de laurel normal ayudará a conservar el color de la tela e incluso la hará más brillante.
El primer método es este: meter diez hojas de laurel y cuatro cucharadas de refresco en una bolsita, y meterla en el tambor de la máquina junto con la ropa.
La temperatura del agua debe ser de al menos 30 grados.
También puedes utilizar decocción de laurel. Hervir diez hojas de laurel con cuatro cucharadas de bicarbonato de sodio en un cazo y mantener al fuego unos 20 minutos, revolviendo.
Vierta el caldo enfriado en un recipiente con ropa, déjelo por un día y luego lave la ropa de la manera habitual.