Si las cosas ya no son blancas como la nieve, algunas amas de casa simplemente dejan de usarlas.
Sin embargo, esta situación se puede corregir mediante métodos sencillos.
Cualquier botiquín contendrá este medicamento popular, que suelen utilizar las amas de casa experimentadas para lavar ropa blanca.
La aspirina ayuda eficazmente a restaurar el tejido a su tono original, eliminando el color amarillento desagradable.
El método es sencillo de utilizar. Basta con utilizar un mortero para reducir a polvo tres pastillas y utilizarlas para reforzar el detergente.
Sin embargo, la técnica no siempre funciona. En este caso, antes de lavarlas, conviene colocar las prendas en un recipiente con agua en la que se hayan disuelto 2-3 pastillas. El tiempo de exposición es de aproximadamente una hora.
Si por alguna razón las cosas blancas se vuelven grises, la situación se puede corregir con refresco común. También lo usamos para fortalecer el polvo.
Es costumbre añadir dos cucharadas grandes de refresco al detergente para ropa.