El almidón es un ingrediente popular que espesa o añade un toque crujiente a los alimentos. Si no dispone de un producto de este tipo, debería buscar una alternativa.
Por ejemplo, puedes utilizar unas cucharadas de levadura en polvo para empanizar.
Como señalan los cocineros experimentados, para una masa diseñada para 400-500 g de verduras, carne o pescado, basta con tomar solo 1-2 cucharadas de levadura en polvo.
Parte del almidón también se utiliza para hacer salsas.
Aquí es fácil sustituirla por harina normal. Pero es mejor tomar 2 veces más que el almidón. Primero puedes freírlo hasta que esté dorado en una sartén seca.
Si no quieres una salsa muy espesa, puedes utilizar nata, mantequilla o incluso un poco de queso rallado. En este caso, puedes hacer que el sabor y la textura sean más interesantes.
Es aceptable sustituir el almidón en los postres.
La gelatina es adecuada para espesar la masa.
Puedes agregar semillas de chía o de lino molidas a los pudines y otros postres semilíquidos. Sólo 2 cucharadas soperas por cada 150 ml de producto corregirán la situación.
Anteriormente hablamos de trucos con almidón que toda ama de casa debería conocer.