No crea en algunos programas de cocina que afirman que se puede comer carne cruda.
La carne debe someterse a un tratamiento térmico, aunque sólo sea porque puede contener larvas de gusanos parásitos.
Los helmintos son peligrosos para la salud y tratarlos es simplemente desagradable.
Los parasitólogos señalan que es mejor no comer chuletas con sangre por la misma razón, solo después de un tratamiento térmico adecuado.
Cuidado con el pescado salado que no ha sido cocinado porque no sabes exactamente cómo ni cuándo se cocinó.
Por ejemplo, si el pescado no se ha congelado completamente, pueden quedar helmintos en él.
Los parasitólogos aconsejan no comer carpaccio, tartar, ceviche, manteca de cerdo y stroganina.
Estos platos deben ser preparados por un chef profesional que tenga las calificaciones adecuadas.