Algunos productos no se pueden combinar entre sí y no siempre se trata de gustos encontrados.
El motivo es que no se recomienda consumirlos en la misma comida, ya que pueden provocar sensación de pesadez en el estómago y acidez de estómago.
Los chefs dan el ejemplo de uno de los platos más populares: las patatas y la carne; esta combinación puede ser perjudicial para la salud.
El caso es que las patatas contienen almidón, que no combina bien con la proteína animal, lo que provoca la fermentación.
Es mejor no comer carne con productos de harina, ya que esto contribuye al aumento excesivo de peso y provoca pesadez en el estómago.
La combinación de carne y fruta tampoco es segura, ya que los platos calientes tardan más en digerirse que los de fruta.
Por lo tanto, muchas personas comen frutas con anticipación, al menos 20 minutos antes de la comida principal.
Se considera que el mejor tándem es la carne y las verduras. Pero conviene evitar comer tomates y queso, ya que esta combinación de productos contribuye a la deposición de sales.