Cuando se trata de un desayuno con requesón, muchas personas empiezan a pensar en las tartas de queso, perdiendo por completo de vista un plato tan increíble como la cazuela.
Esto es exactamente de lo que hablaremos en este artículo, pero no de la cazuela de requesón habitual, sino de aquella en cuya preparación se utilizó chocolate blanco.
Gracias a esto, debes admitir, no es el componente más familiar de la composición, no podrás servir una cazuela ordinaria, sino un postre real.
Pero primero tendrás que asegurarte de que todos los componentes estén disponibles:
Rompe los huevos en un recipiente hondo y bate, luego mezcla la masa resultante con la nata.
Aquí también se enviará chocolate, que primero hay que derretir al baño maría.
Cuando mezcles el contenido del bol, agrégale la harina combinada con la leche.
Solo queda combinar todo con el requesón, ponerlo en una fuente para horno y meter en un horno precalentado a 180 grados durante 20-25 minutos.