El arroz como guarnición se puede preparar al menos de cinco formas, y cada una de ellas nos permite hablar del plato ideal.
Las dificultades surgen con mayor frecuencia con este cereal. El arroz se pega o se quema. Pero con estos consejos prácticamente se eliminan los problemas.
En cualquier caso, primero hay que lavar el cereal con agua fría y luego elegir el método de cocción.
Lo principal aquí es mantener las proporciones. Normalmente se utilizan dos partes de agua por una parte de arroz. El arroz blanco tarda entre 15 y 20 minutos en cocinarse, mientras que el arroz integral estará listo en 40 a 45 minutos.
El pilaf suele prepararse de esta manera. En este caso, se repiten todos los pasos, como cuando se cocinan cereales en una sartén. Pero antes de empezar a cocinar, es necesario freír el grano en aceite vegetal.
Primero debes precalentar el horno a 180 grados centígrados. Luego vierte agua hirviendo sobre el arroz, agrega 1 cucharada de mantequilla al agua (a base de 3/4 taza de cereal) y hornea en un recipiente con tapa. El grano largo estará listo en 35 minutos, mientras que el arroz integral se cocinará en aproximadamente una hora.
Esta es la forma más sencilla de cocinar alimentos en general. Si calcula correctamente las proporciones de agua y grano, es poco probable que surjan problemas. Se vierte el cereal con agua, se selecciona el modo adecuado (cada modelo puede tener el suyo) y se cocina de 30 a 50 minutos. También puedes cocinar arroz en una vaporera.
Coge el arroz lavado, colócalo en un plato de cristal, llénalo de agua y cuece a máxima potencia durante 15-20 minutos. El arroz integral se cocina durante 5 minutos a potencia alta y los 20-25 minutos restantes a potencia media.
Antes de servir, el arroz se debe calentar en el microondas durante 10 minutos.