Muchas amas de casa están acostumbradas a espolvorear generosamente la mesa con harina antes de colocar la masa sobre esta superficie.
Además, las palmas suelen estar cubiertas con el producto suelto.
Esto se hace para que no haya problemas al extender la masa. Gracias a la harina, el producto semiacabado no se pega a la mesa ni a la piel.
Sin embargo, este enfoque también tiene sus inconvenientes. En primer lugar hay que utilizar mucha harina, que mancha la mesa.
En segundo lugar, el producto a granel acaba en una base de harina, que ya tiene suficiente cantidad de este componente.
Para evitar estos problemas, deberías utilizar un truco interesante. No tendrás que usar harina extra. Al mismo tiempo, incluso la masa pegajosa se puede extender sin problemas.
En lugar de rociar este producto sobre los muebles y las manos, es mejor utilizar papel de horno.
El material de pergamino debe colocarse sobre la mesa. Coloca la bola de masa sobre el papel.
El producto semiacabado se debe triturar y luego se le debe colocar una segunda hoja de papel para hornear.
Obtendrá un "sándwich" que se puede procesar de forma segura con un rodillo. La masa sólo se pegará al papel, pero no a la mesa ni a tus manos.
Después de completar el proceso de laminado, el material de pergamino debe retirarse con cuidado de la base de harina.