A la hora de preparar chuletas de pollo, es muy importante recordar que pueden quedar demasiado secas debido a la naturaleza de la carne.
Por ello, es costumbre enriquecer la carne picada con componentes adicionales que ayudarán a darle al plato el nivel de jugosidad deseado.
No es ningún secreto que los profesionales suelen utilizar este componente para mejorar la calidad de los platos de carne. Si agrega el producto al pollo picado, puede obtener chuletas tiernas y jugosas.
Lo mejor es utilizar mantequilla precongelada. Será necesario picar un trozo pequeño con un rallador.
Este truco hará que las chuletas no solo sean más jugosas, sino también saludables. La verdura tiene una composición rica, por lo que estas chuletas se pueden ofrecer incluso a los niños.
Es necesario pelar el calabacín, quitarle las semillas y luego rallarlo.
Si quieres que tus chuletas de pollo queden jugosas y esponjosas, no olvides agregar sémola. Este componente asequible realmente puede transformar un plato.
Se acostumbra tomar 4 cucharadas grandes de sémola por kilogramo de pollo. No empieces a freír el plato de inmediato; espera al menos media hora.