El relleno que se sale de las tartas puede molestar a cualquiera. En primer lugar, los productos horneados ya no tienen un aspecto tan sabroso y apetitoso. En segundo lugar, el relleno que se escapa tiende a hornearse y endurecerse en la bandeja para hornear.
Esto es lo que hacen las amas de casa en este caso: 3 trucos culinarios.
Por ejemplo, si tiene mermelada bastante líquida, para 300 gramos de relleno puede tomar entre 30 y 40 gramos de fécula de patata y 40 gramos de agua. Debe disolver el almidón en agua, verter la mermelada en un recipiente aparte, agregar el almidón, llevar a ebullición en el microondas durante 1,5 minutos, enfriar a temperatura ambiente o colocar en agua fría.
Para 250 gramos de mermelada o mermelada líquida necesitarás 10 gramos de sémola. Simplemente agregue sémola a la mermelada, mezcle con una batidora hasta que quede suave, deje el relleno durante 30 minutos, luego hierva, revolviendo y cocine por otros 3-4 minutos. Ya solo queda enfriar y ya puedes rellenar las tartas.
Para un vaso de mermelada líquida necesitarás 1 cucharadita de gelatina comestible y 2 cucharadas. l. agua.
Se agrega gelatina al agua tibia, se espera 10 minutos, luego la masa resultante se transfiere a mermelada líquida, se agita y se calienta en un baño de vapor hasta que la gelatina se disuelva por completo, pero sin hervir.
Luego se cubre la pieza de trabajo, se deja enfriar y luego se puede usar para hornear.