Una necesidad irresistible de rascarse la nariz puede ser uno de los síntomas de una enfermedad grave.
La picazón en la nariz puede ser causada por un resfriado o alergias. En algunos casos tenemos ganas de rascarnos la nariz debido a la rinitis o la sinusitis y, en ocasiones, los pólipos son la causa.
El malestar también puede ser causado por irritación de la piel de la nariz o enfermedades de la piel; en tal situación, siente un deseo insoportable de frotarse la nariz.
Las causas inesperadas de picazón incluyen migrañas, esclerosis múltiple y estrés.
Como regla general, la picazón en la nariz desaparece por sí sola después de un tiempo. Si este es tu caso, no hay por qué preocuparse.
Sin embargo, si el picor o el hormigueo se vuelve obsesivo o se acompaña de otros síntomas, como descamación, dolor en la nariz, sangrado, fiebre, se debe consultar a un médico.
Para empezar, puedes limitarte a un terapeuta. El médico lo examinará, le hará preguntas sobre su salud y estilo de vida y puede sugerirle análisis de sangre o raspados de piel.
Todos estos procedimientos deben realizarse para hacer un diagnóstico.
Después de determinar la causa de la picazón en la nariz, el médico le aconsejará cómo eliminar las molestias.
O lo derivarán a un especialista como un otorrinolaringólogo, dermatólogo, neurólogo, alergólogo o reumatólogo.