Ha llegado el verano. Mucha gente asocia esta época del año con cosas agradables: vacaciones, descanso, viajes, viajes, baño…
Pero también existen asociaciones negativas: calor, congestión, sudoración profusa...
Una persona se siente avergonzada y desagradable cuando suda.
Y esto es comprensible: existe el riesgo de que se produzcan olores desagradables, así como manchas en la ropa.
No te olvides de las molestias debidas a la sudoración.
Afortunadamente, un problema común del verano se puede reducir.
Para hacer esto, debe prestar atención a algunas recomendaciones simples.
Este consejo puede sorprender a mucha gente: “¿Cómo puede ser esto? Después de todo, ¡este es el tipo de agua que te ayuda a refrescarte en verano!
El caso es que hay un problema: el líquido a baja temperatura estimula las glándulas sudoríparas.
Por tanto, es mejor beber agua a temperatura ambiente.
En general, reponer la deficiencia de líquidos en el cuerpo durante un período caluroso es importante para la salud: una persona se protege de la deshidratación. Si tienes sed, repóngala lo antes posible.
También conviene reducir el consumo de líquidos calientes en verano.
El café y otras bebidas a alta temperatura (té, cacao, etc.) estimulan las glándulas sudoríparas.
Un efecto similar ocurre con el consumo excesivo de alimentos picantes.
El amor por las especias está plagado de la aparición de un efecto calorífico. Esto significa que se liberará mucho sudor.
Los sintéticos claramente no son la mejor opción para la temporada de calor.
El hecho es que dichos materiales no dejan pasar bien el aire, lo que hace que la persona sude.
Es recomendable aplicar este producto sobre la piel seca.
En otras palabras, antes de usar antitranspirante es necesario lavarse y secarse bien. De lo contrario no habrá ningún efecto positivo.
Anteriormente te contamos cómo elegir el protector solar para tu hijo.