El clima de hoy es tal que el hielo de las carreteras prácticamente no desaparece. Y este es un mayor riesgo para los automovilistas.
Uno de los principales peligros en estas condiciones es que el coche patine. Le puede pasar a cualquiera.
El auto pierde el control. Los conductores inexpertos se pierden, lo que provoca accidentes.
¿Qué hacer si te encuentras en esta situación? Los automovilistas experimentados nombraron opciones para automóviles con todo tipo de conducción.
Si el coche deja de obedecer y ha perdido estabilidad, se debe girar el volante en la dirección del derrape, donde va la parte trasera.
En otras palabras, si se desvía hacia la derecha, también debes girar el volante hacia la derecha, si se desvía hacia la izquierda, gíralo hacia la izquierda.
Tan pronto como salimos del patinazo, seguimos avanzando sobre ruedas rectas.
Debes proceder del mismo modo que en un coche con tracción delantera.
Esto significa que giramos el volante en la dirección del derrape.
Una vez que el coche se ha estabilizado, seguimos conduciendo, reduciendo el acelerador, con ruedas rectas.
En ambos casos hablamos de frenado motor, es decir, cuando no pisamos el pedal del acelerador.
Como resultado, el eje se desacelera, lo que permite que la máquina recupere la estabilidad.
Pero con este tipo de conducción, al derrapar, ni siquiera se puede frenar con el motor. Además, no se puede aumentar la velocidad.
Debes centrar toda tu atención en el volante y utilizarlo para alinear las ruedas hasta que el coche vuelva a su posición normal.