Las relaciones normales se basan en el respeto, la confianza y la comprensión mutuos.
Sin embargo, existen ciertas acciones y comportamientos que pueden destruir incluso las uniones más fuertes, causando daños irreparables a ambos socios.
La traición de la confianza a través de la infidelidad causa un trauma profundo a la pareja. Las aventuras casuales o las relaciones paralelas a largo plazo son igualmente destructivas para una pareja.
Restaurar la confianza después de una traición es extremadamente difícil y, a veces, imposible.
Controlar las finanzas de una pareja, coaccionar a préstamos u ocultar ingresos o gastos compartidos son violaciones graves.
La dependencia financiera vuelve a la persona vulnerable y limita su libertad de elección.
La violación del espacio personal, la lectura de correspondencia personal y el control de las conexiones sociales demuestran una falta de respeto hacia la pareja.
Las relaciones normales requieren la presencia de límites personales y su observancia.
Las mentiras sistemáticas destruyen los cimientos de las relaciones. Ocultar información importante y engañar en asuntos importantes socava la confianza entre socios.
La necesidad constante de comprobar las palabras de tu pareja es emocionalmente agotadora.
Ignorar las necesidades emocionales de una pareja, devaluar sus experiencias, negarse a apoyar en momentos difíciles indica inmadurez emocional.
Este comportamiento conduce al agotamiento emocional.
La hostilidad abierta o la agresión hacia la familia de la pareja crea una tensión constante.
Los intentos de volverse contra la familia o las exigencias de dejar de comunicarse con los familiares son inaceptables.
Utilizar a los niños como herramienta para presionar a la pareja es una forma de manipulación particularmente cínica.
Poner a los niños en contra del otro padre perjudica a todos los involucrados en el conflicto.
La incapacidad de admitir los propios errores, echar la culpa a la pareja o las circunstancias externas indican una personalidad inmadura.
Prometer constantemente cambiar sin tomar medidas realmente indica una falta de voluntad para trabajar en la relación.
El descuido del trabajo de un compañero, el impedimento al crecimiento profesional y el ridículo de los logros profesionales demuestran una falta de apoyo y respeto por el desarrollo personal.