Siempre es más fácil romper algo que construir algo, y esta verdad es cierta en todo, incluso en las relaciones entre un hombre y una mujer.
Unas pocas expresiones descuidadas y otra unidad de la sociedad puede desmoronarse.
La psicóloga académica Irina Molvinskaya contó a Gazeta.ru cómo un comportamiento incorrecto puede empujar a los cónyuges al divorcio.
Los problemas cotidianos son algo que se puede llamar inevitable, pero que se pueden prever. Es importante saber que las familias muchas veces se rompen debido a la inestabilidad y los problemas económicos.
La comunicación, o más bien la falta de ella, entre los cónyuges es otro motivo de divorcio.
Los cónyuges no sólo deben discutir el problema y trabajar juntos para resolverlo, sino que también deben estar preparados para buscar ayuda profesional.
Y sólo en tercer lugar como causa de divorcio, según el experto, se encuentra la infidelidad conyugal.
Algunos expertos también aconsejan trabajar los traumas infantiles.