Imagínese: tiene una cita y su interlocutor se pasa toda la noche mirando con entusiasmo la pantalla de su teléfono inteligente.
Intentas iniciar una conversación, pero él parece completamente absorto en su dispositivo, y sólo ocasionalmente tararea en respuesta a tus preguntas sin levantar la vista de su teléfono.
Es obvio que a él no le importa en absoluto que estés aquí y no tiene ningún interés en comunicarse contigo.
Al final, te rindes y tomas tu propio teléfono inteligente para mantenerte ocupado. Difícilmente puedo calificar esta fecha con un 10/10.
Quizás tu pareja tenga asuntos urgentes relacionados con el trabajo o necesite resolver algunos asuntos con familiares o amigos.
Si el motivo es realmente grave, ofrezca reprogramar la fecha para otro momento.
Si te convence de que no pasó nada grave, pero sigue mirando su teléfono inteligente, lo más probable es que simplemente no esté interesado en ti o se haya vuelto dependiente de un dispositivo móvil.
Desafortunadamente, en este caso es difícil imaginar un desarrollo favorable de su relación, por lo que es mejor terminarla antes de que las cosas vayan demasiado lejos.
Anteriormente hablamos de las señales de las personas tóxicas.