Muchos representantes del buen sexo desean casarse.
Las chicas quieren conectar sus vidas con el hombre que aman.
Pero no todos los chicos tienen prisa por proponer matrimonio.
Algunos incluso hablan de su reticencia a formalizar la relación.
¿Qué debe hacer una niña en tal situación?
Si el chico no ha hablado de su falta de voluntad para formalizar la relación, entonces debería insinuar que vale la pena casarse.
Tiene sentido decir varias veces las siguientes frases: “Mi amigo se casó hace poco”, “Pero cuando nos casemos…”
Si el joven dijo directamente que no considera importante tener un sello en el pasaporte, entonces la niña puede informarle a su pareja sobre las ventajas legales y financieras de un matrimonio oficial.
Pero es más importante saber qué medidas se deben abandonar si el joven no tiene ganas de formalizar la relación.
En primer lugar, no es necesario insinuar constantemente el matrimonio. Créame, un hombre entenderá todo la primera o segunda vez. Y entonces sólo se enojará.
En segundo lugar, no conviene "involucrar" a los familiares. Es poco probable que un joven sea feliz si una potencial suegra comienza a persuadirlo para que se case con su hija.
En tercer lugar, no se pueden hacer amenazas. No "te dejaré si no te casas". Tal declaración no sólo no ayudará, sino que sólo empeorará la situación.
Anteriormente, enumeramos las acciones de la esposa por las cuales el esposo puede querer solicitar el divorcio.