En una primera cita siempre quieres dar una buena impresión.
Una forma es la apariencia. Por lo tanto, debes pensar detenidamente tu imagen con anticipación.
No intentes ser una versión mejorada de ti mismo. Puede parecer ridículo o incluso demasiado extravagante.
Es necesario no traicionarte a ti mismo, pero al mismo tiempo debes enfatizar tus ventajas en la imagen.
Además, no debes seguir el consejo estándar de que un hombre debe usar camisa y una niña debe usar vestidos.
Si eres un representante del buen sexo, pero estás seguro de que los pantalones te sientan mejor que las faldas, entonces puedes usarlos con seguridad en tu primera cita.
Las cosas deben ser sencillas, cómodas, pero al mismo tiempo ordenadas, para no preocuparse por nimiedades y no distraerse de la conversación con su pareja.
Cabe recordar que esta regla se aplica no solo a la ropa, sino también a los complementos y zapatos.
Los pies raspados y sangrantes por zapatos nuevos y jeans demasiado ajustados definitivamente arruinarán la impresión general de la reunión.
También debes recordar si el atuendo es apropiado. Esto agregará comodidad al medio ambiente.
Por lo tanto, los vestidos de noche definitivamente no son adecuados para caminar por el parque o hacer un picnic, y no debes elegir pantalones cortos para ir al teatro.
Anteriormente te contamos cómo entender que no estás preparado para una nueva relación.