Nuestros antepasados creían que el bienestar familiar dependía del lugar donde dormían los cónyuges.
Te contamos qué dicen al respecto los signos populares, el feng shui y la psicología evolutiva.
Los eslavos tenían una regla clara: la esposa debía dormir a la derecha de su marido, ser su "mano derecha".
El Feng Shui también afirma que una mujer debe dormir del lado derecho, ya que este lado se considera femenino.
En Japón y China se creía que una mujer no podía tener un hijo si dormía a la izquierda de su marido.
Según la psicología evolutiva, los cónyuges deben confiar el uno en el otro.
Para los hombres este es el lado derecho, para las mujeres es el izquierdo, es decir, el marido debe dormir a la izquierda de su esposa.